Un incendio declarado en la madrugada de este lunes en un bloque de viviendas de la calle Ópalo, en el barrio sevillano de La Macarena, ha obligado a desalojar a sus 28 ocupantes, de los que siete han tenido que ser atendidos por inhalación de humo. Un agente de la Policía Local precisó atención hospitalaria tras resultar lesionado en la cara durante el acceso a las viviendas.
Según la información difundida por Emergencias Sevilla en sus redes sociales, consultadas por Europa Press, varios avisos recibidos minutos después de las 02.00 horas alertaban de un incendio en una vivienda situada en la segunda planta de un bloque de la calle Ópalo, a donde se trasladaron de inmediato efectivos de Policía Local y Nacional, Bomberos y Empresa Pública de Emergencias Sanitarias (EPES) 061.
A su llegada los operativos encontraron un incendio bastante desarrollado con llamas al exterior y se estaban produciendo deflagraciones en el interior de la vivienda incendiada. Mientras un equipo de extinción de Bomberos trabajaba en controlar el incendio, el equipo de rescate evacuó a cinco personas de la vivienda superior, en la tercera planta, que también resultó afectada por las llamas y el humo.
En total siete personas fueron atendidas en el lugar por inhalación de humo y uno de ellos precisó traslado hospitalario para su valoración. Por su parte, un agente de Policía Local resultó lesionado durante el acceso a las viviendas y fue asistido en un centro hospitalario por lesiones en el rostro que precisaron puntos de sutura.
El incendio, cuyo origen se está investigando, quedó extinguido tras afectar en su totalidad a la vivienda de la segunda planta donde se declaró, mientras que la vivienda contigua, la superior de la tercera planta y las zonas comunes del inmueble se vieron afectadas por el humo y las altas temperaturas.
Hasta una inspección a fondo para la investigación del siniestro, los 28 vecinos de las 13 viviendas del bloque han sido desalojadas, de los que 21 han pasado la noche realojados por familiares. Para los otros siete ha gestionado alojamiento la Unidad Municipal de Emergencias Sociales y Exclusión Social (UMIES).
La Policía Nacional se ha hecho cargo de la instrucción de las diligencias, mientras Lipasam tuvo que intervenir para retirar los restos caídos a la calzada como consecuencia del siniestro y de las tareas de rescate y extinción.
Según Emergencias Sevilla, la "rápida intervención" del dispositivo desplegado en la zona, integrado por cinco dotaciones de Bomberos, cinco de Policía Local, tres de Policía Nacional y dos de EPES 061, junto a las dotaciones de UMIES y Lipasam, evitó la propagación del incendio.
Fuentes municipales han informado a Europa Press sobre la reunión mantenida con diferentes operativos en el citado bloque de viviendas, con la participación de técnicos de Urbanismo, Bomberos, Protección Civil y del área de Bienestar Social para valorar los daños en la propia vivienda y en otras superiores.
Las conclusiones recomiendan que se mantenga el desalojo hasta que se resuelvan los daños que afectan a la habitabilidad de las citadas viviendas, aunque "en principio no se aprecian daños estructurales en el inmueble". Así, los vecinos podrán recoger sus pertenencias acompañados por los servicios de emergencia.