Ante las propuestas de Altadis al Ayuntamiento de Sevilla para que el proyecto de reutilización de su antigua planta tabaquera de Los Remedios incluya una pasarela peatonal entre dicho recinto y el paseo de Las Delicias, las asociaciones que reclaman la recuperación del antiguo puente basculante de Alfonso XIII, construido con motivo de la exposición iberoamericana de 1929, exponen que "la propuesta idónea" para tal proyecto es materializarlo mediante el mencionado puente, dado que así se cumpliría la declaración institucional que pesa respecto al puente y la "deuda" pendiente con la citada obra de ingeniería.
Las mencionadas propuestas de Altadis han trascendido después de que el pleno del Ayuntamiento hispalense aprobase una declaración institucional de apoyo a la recuperación del citado antiguo puente, propiedad del Puerto e instalado actualmente en una parcela colindante a la avenida de la Raza, "como pasarela para uso peatonal y de transporte personal alternativo en un lugar emblemático" de la ciudad.
En concreto, la declaración institucional apoya la idea de "acordar con la Autoridad Portuaria y las administraciones competentes y mediante la colaboración, si fuera posible, con el sector privado, su recuperación y reconstrucción sobre el río Guadalquivir, como pasarela para uso peatonal y de transporte personal alternativo en un lugar emblemático de la ciudad, de acuerdo con el dictamen de los técnicos sobre la ubicación y los costes y con el consenso de las asociaciones y entidades ciudadanas" que desde hace años reclaman el rescate de esta infraestructura.
Además, la declaración institucional implica promover el reconocimiento de este antiguo puente metálico como bien de interés cultural (BIC) y su inscripción en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz, así como que cuente con un nivel de protección global a través del propio Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la ciudad.
"TESTIMONIO" DE LA EXPOSICIÓN DEL 29
Todo ello, para rescatar el "elemento arquitectónico singular" que supone el antiguo puente metálico de Alfonso XIII, cerrado al tráfico rodado y humano en 1992 al ser sustituido por el actual puente de las Delicias, "testimonio" además "del gran evento histórico" que constituyó para Sevilla la exposición iberoamericana de 1929.
A tal efecto, los citados colectivos celebran que Altadis haya propuesto "la instalación de una pasarela peatonal para unir el complejo tabacalero con el paseo de las Delicias a la altura de la avenida de Chile y la calle La Rábida", rememorando que los mismos vienen demandando la recuperación del antiguo puente basculante de Alfonso XIII precisamente como pasarela peatonal y ciclista en dicha localización.
"Nos congratulamos y felicitamos de que la idea impulsada por nuestros colectivos de conectar ambas márgenes del río en este lugar haya sido adoptada por los tres proyectos aspirantes a ser desarrollados en la recuperación del complejo de la antigua fábrica de tabacos de Altadis", enfatizan.
"LA PROPUESTA IDÓNEA"
Eso sí, los colectivos defienden que "la propuesta idónea y la única que puede cumplir con el histórico compromiso y deuda" relacionada con el puente de Alfonso XIII sería aquella que "recuperase" dicha obra de ingeniería "en el lugar que se ha conformado como el mejor emplazamiento existente para su recolocación", en alusión a su instalación en el emplazamiento ya señalado merced a la propuesta de estas asociaciones.
Es más, avisan de que "la instalación de cualquier" otra infraestructura en dicha ubicación al margen del puente de Alfonso XIII "provocaría aún un conflicto mayor", pues tal extremo "obligaría a las administraciones a encontrar otro emplazamiento alternativo para el puente, lo que no parece fácil ni probable".
"Desechar un puente único y por su historia y relación con la ciudad singular en el mundo, con vinculación histórica en el entorno urbanístico industrial y de la exposición iberoamericana de 1929, en un emplazamiento único y emblemático, por colocar en su lugar una nueva pasarela de nuevo diseño, sin historia ni vinculación con la zona, no podría parecer aceptable en ningún caso y desde ninguna perspectiva: ni urbanística, ni artística, ni patrimonial-histórica, ni estética, y ni de lógica ni del sentido común más básico. Ni tampoco moral, habida cuenta la cantidad de compromisos incumplidos en este tema", avisan los colectivos.
