La cantante Isabel Pantoja, acusada de blanqueo de capitales en el juicio en el que están procesados también el exalcalde de Marbella (Málaga) y su expareja, Julián Muñoz; la exmujer de éste, Maite Zaldivar, y otras siete personas, ha asegurado que el exregidor "nunca" le dio dinero "ni nada" porque "no tenía". "Era yo la que le daba a él, era yo quien lo mantenía, era yo quien le di trabajo, era yo quien le pagaba su sueldo", ha aseverado.
Pantoja solo ha contestado a las preguntas de su letrado y ha insistido en fijar el inicio de la relación con Muñoz en 2003, en la fiesta de la Candelaria, el 19 de marzo, y ha apuntado que compró el apartamento en el hotel Guadalpín un mes antes, el 24 de febrero, aunque en enero, durante la celebración de la Feria de Turismo de Madrid, Fitur, la promotora Aifos le dijo que si lo compraba le haría "buen precio".
Ha negado que el exregidor interviniera o le diera dinero para la compra de ese apartamento. "Rotundamente no", ha aseverado la cantante, quien ha dicho que "siempre" desde que comenzó a cantar ha tenido mucho "metálico" en casa porque le han pagado mucho de esta forma por sus conciertos y galas. Ha negado que el exalcalde marbellí le hiciera ingresos en efectivo y ha hablado de los ingresos que tiene no sólo por su actividad profesional, sino por otros negocios.
Sobre la casa 'Mi gitana', en la urbanización La Pera de Marbella, ha indicado que es "mi casa", apuntando que está "avalada con todos mis bienes, con todo lo que he comprado con mi trabajo durante 40 años de artista". "Nadie me ha comprado esa casa, todavía la estoy pagando, pero tengo absolutamente todos mis bienes en esa casa, que no tenía por qué tenerla, yo no quería vivir ahí", ha asegurado emocionada.
La cantante ha llegado a la Ciudad de la Justicia sonriente pasadas las 08.30 horas, ha recibido palabras de apoyo a la entrada, pero también críticas. El ministerio fiscal la acusa de un delito continuado de blanqueo de capitales, por el que pide tres años y medio de prisión y multa de 3,68 millones.