El incendio forestal declarado en la tarde-noche del lunes en Ponte Caldelas (Pontevedra), que quemó unas 600 hectáreas en varias parroquias y obligó a activar el nivel 1 debido a su proximidad a las casas, sigue activo pero estabilizado, según informa la Consellería de Medio Rural de la Xunta de Galicia.
El fuego se inició en Castro Barbudo y en el control del mismo han participado dos técnicos, 24 agentes forestales, 70 brigadas, 30 motobombas, ocho palas, siete helicópteros y seis aviones. También colaboraron en la zona efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME).
El último parte actualizado de la consellería da cuenta de un incendio controlado, el de Castrelo de Miño y Toén (Ourense), que finalmente son un único fuego. Comenzó en el primero de los municipios, en la parroquia de Macendo, a las 1.42 horas, y afectó al vecino Toén --a la parroquia de Puga--.
Las estimaciones provisionales sitúan en 31,14 las hectáreas calcinadas en estas localidades, mientras siete agentes forestales, 31 brigadas, 17 motobombas y dos palas se encuentran en el lugar para tratar de extinguir las llamas.
APAGADO EL DE BOIRO-LOUSAME
En la provincia de A Coruña, y después de más de una semana ardiendo, Medio Rural dio por extinguido, a las 20.00 horas de este jueves, el fuego de Boiro, en Macenda, que empezó en Lousame --parroquia de Tállara--. Ardieron 450 hectáreas de monte arbolado.
En la extinción estuvieron presentes tres técnicos, 43 agentes forestales, 94 brigadas, 44 motobombas, cinco palas, nueve helicópteros y 10 aviones, además de efectivos de la UME.
También está sofocado el incendio de A Fonsagrada, en la provincia de Lugo, desde las 21.50 horas de este jueves, después de arrasar unas 20 hectáreas en la parroquia de Freixo, donde participaron un técnico, siete agentes forestales, 16 brigadas, siete motobombas y una pala.
Por último, en Ourense, desde las 22.42 horas de este jueves, el fuego registrado en A Mezquita --en la parroquia de Castromil-- está extinguido, pero calcinó hasta 160 hectáreas de monte raso. En las labores para apagarlo colaboraron un técnico, seis agentes forestales, 15 brigadas, 11 motobombas y dos palas.