La patera que encalló esta mañana en el litoral de Costa Teguise (Lanzarote) con unos 27 inmigrantes magrebíes a bordo, siete de los cuales han perdido la vida, había salido de Marruecos el sábado pasado, según los primeros testimonios recabados por la Guardia Civil entre sus ocupantes.
Parte de los inmigrantes saltaron al agua cuando la embarcación, una lancha neumática, se encontraba frente a la playa de Bastián, en una reacción que resultó fatal para dos de ellos, que se ahogaron.
Los equipos de socorro se encontraron al acceder a la patera con que en su interior había cinco cadáveres más, correspondientes a cinco varones que presumiblemente habían muerto antes de llegar a la costa de Lanzarote, por causas que ahora determinará la autopsia.
La costa de Lanzarote y de Fuerteventura se encuentra sometida a estos días a malas condiciones de mar, con vientos del norte y nordeste de fuerza 6 a 7 y mar gruesa o muy gruesa.
Según ha informado esta noche la Comandancia de Las Palmas, los inmigrantes llevaban en el mar al menos dos días.
Las primeras investigaciones realizadas por la Guardia Civil han permitido además detener entre los supervivientes a uno de los presuntos organizadores de la patera, que llevaba consigo unos 9.000 dirhams marroquíes (unos 800 euros) al desembarcar en la playa.
El arrestado será puesto a disposición del juzgado de guardia en Arrecife en el curso de las próximas 72 horas por delitos de homicidio por imprudencia y contra los derechos de los ciudadanos extranjeros (favorecimiento de la inmigración ilegal).
Del resto de supervivientes, dos continúan en el Hospital Doctor Molina Orosa y 17 han sido entregados a la Comisaría de Arrecife, ya que la Policía Nacional es el cuerpo competente para abrirles los expedientes de extranjería, precisa la Guardia Civil.
