El alto valor de bitcoin, la criptomoneda líder del mercado, crea cada vez más controversia entre los expertos en finanzas. Mientras que algunos afirman que su precio seguirá subiendo sin parar, otros creen que caerá en breves, puesto que comparan esta divisa con la burbuja puntocom. Esta última, la conocida dot-com bubbleen inglés, consistió en una espectacular subida del valor de las empresas tecnológicas entre 1997 y 2001. En sus últimos días, el índice NASDAQ cayó en picado, y aunque las razones fueron variadas, una de ellas fue el elevado precio al que llegaron algunas acciones con fines especulativos.

La subida excesiva de algunos valores durante la burbuja puntocom recuerda a lo que ha estado ocurriendo con bitcoin en los últimos años. Si bien su función principal comenzó siendo la de una divisa tradicional, servir como moneda para adquirir bienes, ahora su uso mayoritario está relacionado con las inversiones. Así pues, un gran número de economistas espera poder obtener beneficios en un futuro cercano a través del dinero depositado en la criptomoneda.

La incertidumbre que despierta bitcoin no solo se basa en sus similitudes con la mencionada burbuja, sino que tienen que ver con el éxito de criptomonedas como ethereum, que han multiplicado su precio varias veces más que bitcoin en el último año. Este hecho hace pensar que quizás el auge de la criptomoneda líder ha llegado a su fin, y que ahora es el momento de que sus sucesoras ocupen su lugar. Un argumento que apoya esta teoría es que bitcoin sigue teniendo unas tarifas altas, mientras que otras divisas digitales se han adaptado al usuario.

Si analizamos el precio actual de la criptomoneda líder, se puede observar que está seis veces por encima de su valor real, por lo que puede bajar de forma veloz y exagerada. Esta posibilidad supondría la quiebra para miles de accionistas, además de la pérdida de confianza en el bitcoin. No obstante, no sería la primera vez que la divisa tiene altibajos notables. Una de sus características más presentes desde su creación es su volatilidad, así que no sería una sorpresa. 

De todos modos, también existen motivos para pensar que bitcoin continuará como hasta ahora. Por un lado, cada vez más organismos se preocupan por su legalización. Al ser una moneda digital descentralizada, su uso no siempre ha seguido los protocolos que se considerarían legales para una divisa tradicional, por lo que se han establecido una serie de normas para que su circulación esté recogida en un marco legal. A raíz de ello, más comerciantes han decidido confiar en ella y aceptarla en sus negocios.

También hay que tener en cuenta que sus unidades son limitadas, lo cual apoyaría que su precio se siga elevando hasta que no queden más. Asimismo, hay estudios que afirman su fiabilidad. Por ejemplo, de acuerdo con una encuesta elaborada por las empresas Triad Securities y Datatrek Research, el 40% de los accionistas piensa que bitcoin es una inversión tan fiable como el oro. En consecuencia, aunque el precio del ethereum se multiplique más rápido, lo más probable es que bitcoin siga siendo la criptomoneda líder durante los próximos años.