Mario Jiménez, portavoz parlamentario del PSOE, se encargó ayer de adelantar antes de la celebración de la Diputación Permanente que no habría pleno extraordinario ni para debatir la reprogramación ni la ejecución del Plan Infoca, puesto en duda por el PP de forma “tremendamente irresponsable”, según el socialista, que incluso acusó a los populares de “estar llamando al fuego, estimulando a cuatro desaprensivos o desequilibrados” al trasladar un mensaje de inseguridad y desprotección.
El tono de las críticas de Jiménez al PP y en especial a su líder, Javier Arenas, fue similar al hablar de las reprogramaciones, llegando incluso a acusar, ya en la Diputación Permanente, a PP e IU de “reeditar la pinza”, ya que Diego Valderas defendió igualmente la necesidad de que la consejera de Obras Públicas, Rosa Aguilar, explicara los recortes aprobados por su departamento, así como los que realizará Fomento, después de que el presidente Rodríguez Zapatero anunciara una revisión de los mismos.
Jiménez reiteró una vez más que la reprogramación ya fue abordada en el debate del estado de la Comunidad y que la consejera comparecerá en septiembre para explicar “de forma transparente” cuáles serán los proyectos afectados, por lo que el pleno extraordinario no responde más que a una estrategia de “recuperación de las asignaturas suspendidas” de Arenas frente a Griñán.
Según señalaba el portavoz socialista, no se paralizarán ninguna de las obras programadas y existe el compromiso de invertir 170 millones de euros más en ejercicios posteriores para nuevos proyectos, lo que permitirá crear más de 3.000 empleos.
En su argumento, justificó la decisión de reprogramar las obras públicas en la necesidad de “no entrar en un calendario infernal” en el que la Junta no pueda atender a los pagos con las empresas adjudicatarias, acomodando “los plazos a la capacidad financiera de la Junta”, por lo que calificó de “ceremonia de la confusión y mentira” la estrategia del PP con este asunto.
En cuanto a los proyectos afectados por los recortes del Ministerio de Fomento, como es el caso de la A-7 por la provincia de Granada, Jiménez apuntó que hay abierta una negociación con las empresas pero que tampoco había que dar por cerrado el escenario de recortes tras el anuncio del presidente del Gobierno, que dependerá del nuevo escenario económico que se marque.
Las explicaciones de Jiménez se tornaron en tensión cuando se trasladaron a la Diputación Permanente, donde PP e IU consideraron “ineludible” e “imprescindible” la comparecencia de Aguilar en el Parlamento.
Así, la portavoz del PP, Esperanza Oña, consideró “insultante” que se le niegue información al Parlamento cuando desde la Junta dicen que no va a afectar al empleo y el Gobierno central lo desmiente, mientras Diego Valderas (IU) criticaba que se le negara “el pan y la sal” al Parlamento, negándole la posibilidad de debatir lo que se lleva a cabo mediante decretazos. “Esto es como las lentejas, o te las comes o las dejas”, sentenciaba.
Deuda con el Estado
Tampoco los 1.475,9 millones que la Junta deberá pagar al Estado en 2011 por los anticipos del anterior sistema de financiación correspondientes a 2008 se olvidaron ayer en el cruce de declaraciones, deuda que el popular Antonio Sanz achacó directamente a la “mala gestión” de los Gobiernos de Chaves y Griñán, que ponen en riesgo derechos sociales y servicios públicos.
Sanz advirtió que la cantidad correspondiente a 2008 puede verse multiplicada por cinco cuando se liquide el año 2009, lo que significará “una hipoteca para una generación de andaluces”.
Mientras, Mario Jiménez criticó que PP e IU coincidieran en asimilar esta cantidad con la deuda histórica: “A Arenas le dio una insolación”, apuntaba el socialista para señalar que mezclar ambos conceptos cuando son “de primero de política autonómica”.
Jiménez se preguntó si tanto Arenas como Valderas creen que la Junta debe “despatrimonializarse” en caso de que hubiera una compensación, quita o aplazamiento, atacando directamente la postura de incoherencia del líder popular al no respaldar un aplazamiento como habían solicitado también las comunidades gobernadas por el PP.
Valderas sí que anunció que presentarán una iniciativa tanto en el Congreso como en el Parlamento para que se establezca una moratoria hasta el 2015, momento en el que calculó podría estar recuperada la economía y el empleo, y que el pago se realice en diez años. El responsable de IU no dejó pasar la ocasión para recordar que han pasado 30 años de espera para cobrar la deuda histórica “y aún no está pagada”.
El “cara al sol” de Arenas en el homenaje a Blas Infante
El portavoz parlamentario del PSOE, Mario Jiménez, fue ayer especialmente critico con el homenaje que el PP realizó a Blas Infante en el Parlamento, acusándoles de utilizar la institución para un “acto partidista” contra una iniciativa aprobada por unanimidad para celebrar en este año el aniversario de su nacimiento y no su fusilamiento.
Según Jiménez, la palabra del líder del PP “no vale nada, es papel mojado”, calificando de “trilero y fullero de la política” a Arenas, del que dijo que había estado “cara al sol homenajeando al padre de la Patria Andaluza”, mientras otros dirigentes del PP criticam su figura e incluso la equiparan a Falange, como hizo la portavoz del PP Esperanza Oña. “Resulta cínico, hipócrita y falso ver a los dirigentes del PP en su proceso de revisión de la historia”, cuando fue Falange la que lo detuvo por sus ideas.
El PP se defendió ayer afirmando que el acuerdo parlamentario no incluía ninguna prohibición de conmemorar su fusilamiento.
