El violento aspirante a caballero jedi -o más bien a pérfido Sith- es David Allen Canterbury, un hombre de 33 años que el padado 14 de diciembre, pocos minutos antes de las diez de la noche, entró en una tienda de Toys 'R' Us, se dirigió directamente a la zona donde están los juguetes de La Guerra de las Galaxias. Una vez allí, armado con un sable láser en cada mano, comenzó a atacar a los clientes del establecimiento.
Según informa Oregon Live, a continuación salió con las réplicas de las espadas de luz fuera de la tienda y, ni corto ni perezoso, arremetió contra agentes de la policía. Los agentes trataron de reducirlo con una pistola Taser, pero Canterbury desvió con éxito uno de los cables y cargó contra ellos. Finalmente, y tras un forcejeo que acabó con David Allen Canterbury en el suelo, la policía logró arrestarlo.
Aquel rocambolesco episodio tuvo lugar hace ya mes y medio. Ahora el juez ha condenado a su aturo a 45 días de prisión, dos años de libertad condicional y una evaluación de salud mental que podría requerir tratamiento por asalto y resistencia a la autoridad.
Cargos que, lejos de refutar, Canterbury asume con resignación. El condenado pidió perdón a sus víctimas y comunicó al juez que ya está buscando ayuda profesional para mejorar salud mental. El juez no incrementó su pena por violar los términos de su libertad condicional, en la que se encontraba tras ser condenado por posesión de heroína.
Eso sí, Canterbury ya no podrá entrar nunca más en una tienda Toys 'R' Us.
